jueves, 8 de julio de 2010
Expertos internacionales limitan el contenido de melamina en los alimentos
Se establecen los límites máximos
El Codex vela por la inocuidad y calidad de los alimentos
La concentración máxima de melamina que puede estar presente en los preparados en polvo para lactantes es 1 mg/kg, y en otros alimentos y en los piensos esta sustancia no deberá exceder los 2,5 mg/kg, según las nuevas disposiciones del órgano normativo de las Naciones Unidas en materia de alimentos, la Comisión del Codex Alimentarius.
La melamina es una sustancia química utilizada en diversos procesos industriales, incluida la producción de plásticos para fabricar vajillas y utensilios de cocina, así como para revestimientos de latas, y es inevitable que aparezcan rastros de la misma en los alimentos, transmitidos por contacto sin que representen un problema para la salud.
Sin embargo, esta sustancia en grandes concentraciones es tóxica, como sucedió recientemente en preparados para lactantes, leche en polvo y alimentos para mascotas, debido a que se añadió deliberada e ilegalmente para incrementar el contenido aparente de proteínas en estos productos. Murieron lactantes y niños por este motivo y enfermaron gravemente otros cientos de miles.
"Establecer niveles máximos ayudará a los gobiernos a distinguir entre los niveles bajos de la presencia inevitable de melamina, que no son nocivos para la salud, y la adulteración intencional, con lo que se protegerá la salud pública sin crear obstáculos innecesarios al comercio internacional", dijo Martijn Weijtens, Presidente del Comité del Codex sobre Contaminantes en los Alimentos. Estos niveles nuevos, si bien no son vinculantes jurídicamente, permitirán a los países rechazar la importación de productos con niveles excesivos de melamina.
Asistieron al 33º período de sesiones de la Comisión del Codex Alimentarius, celebrado en Ginebra, alrededor de 500 delegados de unos 130 países. Otras decisiones tomadas en la reunión son:
Medidas de higiene para ensaladas y mariscos más sanos
Las hortalizas frescas de hoja forman parte de una alimentación saludable y se cultivan en diversas condiciones; se comercializan local y mundialmente para que el consumidor las encuentre disponibles todo el año. Conforme estos productos pasan a lo largo de la cadena de suministro desde la granja hasta la mesa, se pueden contaminar con patógenos como la Salmonella, la E. coliy el virus de la hepatitis A.
Las nuevas medidas del Codex ofrecen una orientación específica para la producción, cosecha, envasado, elaboración, almacenamiento, distribución, comercialización e información al consumidor, a fin de reducir los riesgos para la inocuidad de los alimentos asociados a estos productos. La orientación comprende aspectos como el control de las aguas de irrigación, la refrigeración y el almacenamiento, así como que los consumidores se laven correctamente las manos.
La Comisión también hizo recomendaciones específicas para combatir las bacterias en los mariscos a lo largo de la cadena de alimentos. En años recientes ha aumentado la notificación de brotes de enfermedades de origen alimentario a causa de bacterias Vibrio, comúnmente asociadas al consumo de mariscos, especialmente las ostras, que muchas veces se consumen crudas. Las nuevas medidas del Codex ayudarán a reducir al mínimo estos riesgos.
Aflatoxinas
Se establecieron niveles máximos de 10 µg/kg (microgramos por kilogramo) para las aflatoxinas en las nueces del Brasil (sin cáscara, listas para el consumo) y 15 µg/kg para las nueces del Brasil sin cáscara (destinadas a ulterior elaboración), y la Comisión adoptó asimismo un código de prácticas para prevenir esta contaminación.
Las aflatoxinas son toxinas fúngicas carcinogénicas que contaminan el maíz, los cacahuetes y otros cultivos alimentarios como las nueces de árbol en determinadas condiciones.
Nuevos métodos para determinar el contenido de los alimentos
Los métodos de análisis y de toma de muestras son la base necesaria para la inspección y control de los alimentos. Las nuevas directrices adoptadas por la Comisión permitirán hacer pruebas para determinar si los alimentos se obtienen con biotecnología moderna, para determinar la autenticidad de las variedades de alimentos, como las especies de pescado, y para establecer la presencia de alérgenos.
El acuerdo sobre las directrices señala un importante consenso internacional en materia de biotecnología, para lo cual la Comisión ya ha creado diversas directrices para evaluar la inocuidad de alimentos obtenidos con medios biotecnológicos modernos.
La Comisión del Codex Alimentarius se estableció hace 47 años, su funcionamiento es responsabilidad conjunta de la FAO y la Organización Mundial de la Salud, y establece normas internacionales para los alimentos con el fin de proteger la salud de los consumidores y garantizar prácticas leales en el comercio de alimentos.
El producto de sus actividades es el Codex Alimentarius (en latín: "código de los alimentos"), un conjunto de normas internacionales que velan por la inocuidad y calidad de los alimentos. Estas normas, cuando se incorporan en la legislación de los países, contribuyen a la inocuidad de nuestros alimentos y al comercio internacional de alimentos.
La Comisión del Codex Alimentarius es el ejemplo más antiguo de colaboración entre organizaciones en el sistema de las Naciones Unidas. Tiene 182 estados miembros y una organización miembro, la Unión Europea.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario