En el marco de la lucha mundial contra el cambio climático que promueve las Naciones Unidas, el Presidente de la República, Alan García Prez, plantó esta mañana en el frontis de la Base Aérea del Callao el árbol Nº 100 Millones, con el cual se concluye la Campaña Nacional de Forestación ejecutada por el Ministerio de Agricultura a través de AgroRural.
El Jefe de Estado destacó que gracias a esta campaña el Perú se ubica en el puesto 9 del Ranking de las Naciones Unidas y 1º en Latinoamérica. “El Perú ha hecho un real aporte a la lucha mundial contra el cambio climático” indicó tras la instalación de un plantón de molle costeño.
De esta manera se concluye la Campaña Nacional de Forestación de 100 millones de árboles, ejecutado por el Ministerio de Agricultura a través del Programa Nacional de Desarrollo Productivo Agrario Rural - AgroRural.
En el acto – realizado al paso del Presidente antes de partir rumbo a la región La Libertad- acompañaron el Ministro de Agricultura, Ing. Adolfo De Córdova Vélez, el director ejecutivo de AgroRural, Arq. Rodolfo Beltrán Bravo y el alcalde del distrito limeño de Carabayllo, Rafael Alvarez Espinoza.
Acto seguido, el titular de Agricultura y el director ejecutivo de AgroRural se dirigieron al distrito limeño de Carabayllo, donde participaron en una ceremonia con motivo del cierre de la Campaña Nacional de Forestación de 100 millones de árboles. Allí se develó una placa y se plantó un árbol simbólico.
La Campaña Nacional de Forestación de los 100 millones de árboles se realizó en dos etapas. En la primera, entre los años 2008 y 2009, se sembraron 40 millones y en la segunda etapa 2009 y 2010, se plantaron 60 millones.
En la actividad forestal realizada a nivel nacional, convocó la participación masiva de la población organizada de las zonas rurales de la costa, sierra y selva, mediante la instalación de plantones forestales de especies como Eucalipto, Pino, Ciprés y especies nativas como el Molle, Quenhua y otros.
La Campaña motivó la movilización de 200, 300 y hasta 500 mil personas en un solo día en las jornadas forestales, en su mayoría mujeres conservacionistas.
La proyecto de plantación masiva de árboles comenzó en el año 2006, cuando el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente – PNUMA, lanzó la cruzada mundial denominada “Plantemos para el planeta: Campaña de los mil millones de árboles” convocando a todos los países a aunarse a la misma.
Fue entonces que el Ministerio de Agricultura a través de entonces Programa Nacional de Manejo de Cuencas Hidrográficas y Conservación de Suelos –Pronamachcs (hoy AgroRural) decidió sumarse a la convocatoria del máximo organismo mundial y puso en marcha una intensa campaña de forestación a nivel nacional, logrando en una primera acción duplicar la producción de plantones forestales.
Para este objetivo, los plantones forestales se produjo en los 4,800 viveros comunales y 30 viveros institucionales, y se utilizó alta tecnología, para ubicar mediante satélite (georeferenciar) los viveros y áreas reforestadas y la evolución de la campaña.
Previo al desarrollo de la Campaña Nacional de Forestación, se realizó una Campaña de concientización y sensibilización sobre la importación de árboles.
En esta cruzada por la forestación se sumaron instituciones públicas y privadas, empresas mineras, ONG’s e instituciones educativas. Una de ellas fue el programa “Construyendo Perú” del Ministerio de Trabajo, que aportó S/. 22 millones, con lo cual se pagó mano de obra en la siembra de los árboles. En ambas campañas se generó un total de 6 millones de empleos a niel nacional.
La actividad forestal genera beneficios maderables, y no maderables como la producción de Hongos y semillas. Por ejemplo, lo industrialización de los hongos de Marayhuaca (Ferreñafe – Lambayeque), permitió mejorar el nivel de vida de familias en situación de extrema pobreza. Asimismo la goma de semilla de tara generó una gran demanda en el mercado internacional.
La Campaña Nacional de Forestación de los 100 millones de árboles representa una de las acciones más exitosas en el mundo, por su impacto en la mitigación de los efectos del cambio climático.
